Costumbres europeas en Adviento y Navidad

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Vamos a viajar por diferentes países de Europa para conocer sus costumbres navideñas.

Austria: «Noche de paz, noche de amor»

En Austria el Adviento empieza a finales de noviembre o a principios de diciembre. Cada Domingo de Adviento, hasta el 24 de diciembre, se enciende una vela de la corona de Adviento.

Las coronas se elaboran cada año y destacan por su colorido; se pueden realizar en casa o comprar en las floristerías. Las hay tradicionales, de forma redonda con ramas de pino de un verde intenso, lazos rojos y clásicas velas del mismo color, pero también existen versiones más modernas con ramas de poinsettia llenas de colorido dispuestas en posición vertical en mantos de flores o tubos de orquídeas.

Los niños austriacos reciben los regalos de San Nicolás y su compañero “Krampus”, que les vienen a visitar el 6 de diciembre. La Nochebuena se celebra con toda la familia reunida alrededor de un árbol de Navidad decorado y con regalos para todos. Después, como marca la tradición, se acude a la iglesia para presenciar la Misa del Gallo. El villancico “Noche de paz, noche de amor”, un clásico de la Navidad que se ha traducido a muchos idiomas, se cantó por primera vez en Austria a principios del siglo XIX.
Para los austriacos el final de la Navidad lo marca el 6 de enero, festividad de la Epifanía. Ese día los niños, disfrazados de Melchor, Gaspar y Baltasar, van de puerta en puerta y cantan villancicos para desear a la gente un feliz año nuevo y recaudar dinero para causas benéficas.


Bélgica: «Sinterklaas» y «Zwarte Piet»

La Navidad empieza pronto en Bélgica con el día de “Sinterklaas”. En la noche del 5 de diciembre, “Sinterklaas” reparte regalos acompañado de su ayudante, “Zwarte Piet”. Los niños colocan sus zapatos en las chimeneas y dejan heno y azúcar para el caballo de Sinterklaas. No se debe confundir Sinterklaas con Santa Claus, ya que se trata de un santo cuyo nombre está relacionado con frecuencia con el período de Navidad y Adviento, pero que nada tiene que ver con Papá Noel.

En Bélgica, la Navidad se celebra con autos de Navidad, procesiones y mercados navideños. Los belgas pasan los días de Navidad con sus familias. Los adornos navideños, como un árbol de Navidad magníficamente decorado, el resplandor de las velas encendidas, así como una clásica y llamativa poinsettia de color rojo, crean el ambiente ideal para estas horas de contemplación.


República Checa: ramas de cerezo en el día de Santa Bárbara

En la República Checa, el 4 de diciembre se celebra el día de Santa Bárbara en conmemoración de esta mártir, cuya historia se remonta a la época de las primeras persecuciones cristianas. En todo el país se cortan ramas de cerezo con motivo de la festividad de Santa Bárbara y se ponen en agua. Si florecen durante los días de Navidad, ello es sinónimo de buena suerte y de una posible boda para el próximo año.

En la actualidad se combina esta tradición navideña propia de la República Checa con elementos decorativos (por ejemplo en pequeñas cestas de paja se ponen las ramitas de cerezo, todavía sin florecer, junto con poinsettias en miniatura y adornos propios de la Navidad). De este modo se crea un motivo navideño confeccionado con elementos naturales y que combina de forma atractiva lo tradicional con lo moderno.


Dinamarca: corona y vela calendario

Durante el período de Adviento, en Dinamarca se elaboran de forma tradicional una gran cantidad de adornos para decorar la casa. La mayoría de familias danesas confeccionan ellas mismas la corona de Adviento con sus cuatro velas, que simbolizan los domingos del Adviento cristiano. Los accesorios clásicos de la corona son pequeñas poinsettias de color rojo o crema, ramitas y brillantes adornos navideños.

Además de la corona de Adviento, la vela calendario es una tradición muy especial para los niños daneses, que esperan ansiosos la llegada de la Navidad. La vela se divide en números o líneas horizontales, que luego se queman a medida que pasan los días.

En Dinamarca, el período de Adviento cuenta con la presencia de los “Julenisser”, pequeños diablillos que gastan bromas a adultos y niños hasta que llega la Navidad. Sin embargo, no pretenden hacer daño a nadie, ya que ellos también desean vivir una Navidad llena de paz y armonía.

La Nochebuena se celebra en familia con una comida tradicional. En el postre se esconde una almendra y el afortunado que la encuentra recibe un regalo. Antes de abrir los regalos de Navidad, los daneses se cogen de la mano, cantan villancicos y bailan alrededor del árbol de Navidad.

Inglaterra: pudín de Navidad y muérdago

La Navidad inglesa se celebra el 25 de diciembre. En Nochebuena se cuelgan tradicionalmente los calcetines en la chimenea, ya que esa misma noche Papá Noel vuela sobre los tejados con su trineo de renos y baja por la chimenea para traer los regalos.
Antes de que llegue Papá Noel, en los hogares ingleses es tradicional decorar las casas con motivos navideños. Entre los adornos típicos se encuentran las poinsettias de un rojo intenso, que quedan muy bien dispuestas alrededor de la chimenea, así como el muérdago, que se cuelga del techo. Es una costumbre inglesa besar a un ser querido cuando uno se encuentra debajo del muérdago.

Para los ingleses, el pavo, los pasteles de carne picada y el pudín de Navidad son elementos esenciales para el menú navideño. Incluso en la actualidad, el ‘chef’ esconde una moneda de plata en el pudín para que haya buena suerte. En la comida suele reinar un ambiente distendido y alegre; por eso, no resulta extraño ver a la gente con divertidos sombreros y abriendo regalos durante la comida de Navidad. No obstante, la calma se apodera de los hogares ingleses cuando se retransmite el discurso de diez minutos pronunciado por Su Majestad la Reina.

Finlandia: adornos de Navidad hechos a mano

 En Finlandia, el 24 de diciembre es el día más importante de la Navidad. Las celebraciones empiezan al mediodía, cuando, según una antigua tradición medieval, se proclama de forma ceremoniosa la paz navideña en la ciudad de Turku, la antigua capital de Finlandia.

Con la llegada de la Navidad, muchos finlandeses decoran sus casas con adornos navideños. Algunas de estas creaciones, a menudo elaboradas con gran exquisitez, se realizan con paja, según las diversas y centenarias tradiciones de Finlandia. Además, las velas y las plantas decorativas de la temporada, como las clásicas poinsettias en miniatura de color rojo, contribuyen a crear un ambiente idóneo para la celebración de las fiestas en familia.

La Nochebuena se caracteriza por la abundante comida, los villancicos tradicionales y la entrega de los regalos. En este día también es tradicional recordar a los ya fallecidos. La visita al cementerio forma parte del día de Nochebuena. Durante esta noche, los cementerios nevados de Finlandia se convierten en un impresionante mar de velas encendidas.

Francia: Navidad culinaria

En Francia, la Navidad es considerada el momento cumbre del año. A diferencia de muchos otros países europeos, el período prenavideño apenas tiene importancia para los franceses. Tan sólo las calles comerciales aparecen engalanadas con luces y árboles de Navidad. Los franceses compran su árbol de Navidad a principios de diciembre y lo decoran en familia. Los niños reciben un calendario de Adviento el 1 diciembre y cada mañana, hasta el día 25 del mismo mes, descubren un regalo.

Nochebuena es un día laboral más para los franceses. Sin embargo, por la noche la familia se reúne para disfrutar de una opulenta cena de Navidad. En Francia, los placeres culinarios tienen una gran importancia en las celebraciones navideñas. La comida tradicional de estas fiestas es el “Réveillon”, un elaborado festín compuesto por muchos platos. El Papá Noel francés (“Père Noel”) entrega los regalos en la noche del 24 al 25 de diciembre.

Toda la familia participa en la decoración de las habitaciones, las casas y los árboles de Navidad. En Francia, la comida de Navidad también es un auténtico festín para los ojos. Las poinsettias de pequeño tamaño son especialmente idóneas para decorar la mesa. Los franceses, que llaman a esta popular planta de interiores “Étoiles de Noël” (estrellas de Navidad), la utilizan para decorar habitaciones y para regalárselas entre ellos a lo largo de todo el año. En Francia, al igual en muchos otros países de Europa, las poinsettias se han convertido en adornos navideños hace tan solo unos años.


Alemania: el calendario de Adviento prenavideño

Los días previos a la Navidad tienen una relevancia especial en Alemania. Para las familias alemanas, las galletas de Navidad, las coronas de Adviento y el tradicional calendario de Adviento son elementos tradicionales de estos días. El calendario de Adviento, con sus 24 regalitos enumerados individualmente, acorta la larga espera de los niños, ilusionados con la inminente llegada de la Navidad. Cada uno de los regalos, envueltos con sumo cuidado, se abre cada mañana hasta que llega el punto álgido de las fiestas, es decir, la Nochebuena y los días siguientes.

El calendario de Adviento se convierte a menudo en un elemento decorativo y adopta la forma de un exquisito arbusto de color rojo intenso creado a partir de diversas poinsettias que se cuelgan con pequeños regalos. Esta versión moderna y creativa del calendario de Adviento es un llamativo adorno durante toda la temporada prenavideña.

Grecia: el barco de Navidad

La Navidad es uno de los acontecimientos religiosos más importantes de Grecia. Los griegos se desean “Kales Giortes” (felices fiestas) entre el día de Nochebuena y el de la Epifanía, el 6 de enero. En todo el país, los niños van de puerta en puerta y cantan los “Kalanda”, es decir, los cánticos de alabanza que traen felicidad y buena suerte, acompañados por tambores y campanas. Para protegerse de los duendes traviesos se encienden hogueras de Navidad durante doce noches, aunque es una costumbre que se practica sobre todo entre la población rural.

Además del árbol de Navidad o en vez de éste último, se adornan barcos en miniatura. Esta tradición está relacionada con el hecho de que la antigua Grecia fuera en su momento una destacada potencia marítima. Cuando se acerca la Navidad en Grecia, barcos de vela adornados con luces navegan por las habitaciones decoradas. Las ventanas y la chimenea se adornan profusamente con clásicas poinsettias de color rojo, que se encargan de crear el ambiente navideño.

Los niños griegos tienen que esperar hasta Año Nuevo para recibir sus regalos: San Basilio los deposita delante de sus camas en la madrugada del 1 de enero. Este mismo día, en Grecia se sirve un pastel con una moneda dorada en su interior. Quien encuentre dicha moneda tendrá buena suerte en el año que acaba de empezar. En el día de la Epifanía, en este país se celebra el bautismo de Cristo. En muchas regiones, el agua potable es bendecida con motivo de esta ocasión.

Italia: el belén y el árbol, símbolos navideños

En Italia, el período navideño es bastante largo: empieza el 8 de diciembre y finaliza el 6 de enero, día de la Epifanía. Durante estos días se decoran las casas con poinsettias, árboles de Navidad, el tradicional belén y otros elementos llenos de colorido. Algunos italianos ayunan el 23 o el 24 de diciembre para luego disfrutar de una comida tradicional después de la Misa del Gallo. En algunas regiones de Italia, los niños pueden abrir sus regalos el 24 después de medianoche, mientras que en otras tienen que esperar hasta la mañana siguiente. El 25 de diciembre, tras la tradicional comida de Navidad, los niños suelen recitar poemas delante de sus familiares y son obsequiados con pequeñas cantidades de dinero.

Otra fecha importante es el 6 de enero, día en el que llega «Befana», la vieja y pobre bruja buena conocida por todos; lo hace durante la noche (entre el 5 y el 6 de enero), come frutos secos y galletas que le han dejado los niños y, antes de marcharse volando, deja los regalos en los calcetines: carbón para los que no se han portado bien y caramelos para los niños buenos.

Por encima de todo y junto con el árbol navideño, el belén es un importante símbolo de la Navidad italiana. Sirve para recordar a Francisco de Asís, que fue el primero en representar la historia de la Navidad con figuras. El «presepio», que generalmente cuenta con figuras trabajadas a mano, se convierte durante la Navidad en el centro de atención de muchas familias italianas.

Todos los personajes, excepto el pequeño bebé, se colocan en el belén a partir del 8 de diciembre, mientras que el recién nacido no se pone hasta el 24 de diciembre después de medianoche.
La Italia moderna combina la tradición con los gustos actuales y esto significa añadir un toque contemporáneo a los adornos tradicionales: con las ramas de filigrana de la poinsettia se puede crear un árbol de Navidad alternativo y las flores de esta misma planta pueden ayudarnos a decorar el belén para conseguir un ambiente que recuerde a lejanos países: una pirámide cubierta con poinsettias de color rojo y blanco-crema, una base de poinsettias llenas de colorido para un árbol de Navidad tradicional y un belén adornado con delicadas hojas de la misma planta navideña de color blanco-crema.

Países Bajos: regalos de “Sinterklaas”

El período de Adviento en los Países Bajos empieza con una tradición que, originariamente, nada tiene que ver con la Navidad: la fiesta de San Nicolás es una de las principales celebraciones de la temporada. Según la leyenda, San Nicolás, llamado «Sinterklaas”, llega a los Países Bajos en noviembre, tres semanas antes de su cumpleaños. En su barco cargado de regalos visita los puertos del país en calidad de patrono de los marineros, y es recibido por la Reina Beatriz y multitud de personas.

Durante las próximas noches, Sinterklaas recorre todo el país acompañado de “zwarten Piet”. Los niños holandeses reciben sus regalos el 5 de diciembre. Una vez que Sinterklaas ha abandonado el país, los árboles de Navidad se empiezan a adornar por doquier. Las plantas que florecen en invierno, como la poinsettia de un intenso rojo, forman parte de los adornos típicos navideños. Estas populares plantas se incluyen en arreglos clásicos y modernos, ya sea de forma individual o en grupos. Sin mucho esfuerzo se pueden conseguir llamativas creaciones con poinsettias replaceadas en flamantes jarrones o floreros y acompañadas por brillantes velas y accesorios navideños.
En Nochebuena, muchas familias van a la iglesia. El 25 y 26 de diciembre, la familia y los amigos se reúnen para cenar y hacer la entrega de los regalos.


Noruega: gnomos de Navidad y «Julman»

La Navidad escandinava (llamada “Jul”) tiene sus orígenes en antiguas costumbres relacionadas con el duro invierno y las cosechas. El Papá Noel noruego, que responde al nombre de «Julenissen», acompañado por sus ayudantes, reparte regalos y buena suerte tanto en los hogares como en los establos. En la víspera del día de Navidad, los niños noruegos ponen tazones de gachas en las repisas de las ventanas para «Julenissen», que ha viajado desde Laponia con su trineo de renos para visitar a todos los niños de Noruega.
El banquete de Navidad se llama “Julbrod”; en otros tiempos se servían hasta 60 platos diferentes a amigos y familiares. En la actualidad, la crema de avena, con una almendra oculta en su interior, sigue siendo un elemento importante de esta comida. Quien encuentre dicha almendra tendrá perspectivas de contraer matrimonio en el año que está a punto de empezar.

Los noruegos decoran sus casas con típicos adornos nórdicos de Adviento, principalmente confeccionados a partir de productos naturales, como por ejemplo un arcón rústico de madera relleno de un manto floral que se emplea como base para arreglos hechos de esquejes de ramas, trozos de corteza y poinsettias en miniatura.

Polonia: obleas de Navidad e invitados inesperados

El Adviento en Polonia es, por tradición, un período muy importante durante el cual muchos adultos y niños se abstienen por voluntad propia de placeres excesivos (en la mayoría de los casos, sobre todo dulces) e intentan alcanzar la paz y la armonía. Los comerciantes, además de sus tiendas, también se dedican a decorar las calles con el objetivo de crear un auténtico ambiente navideño. Por otra parte, el hecho de colocar árboles de Navidad en las principales plazas de las ciudades se está convirtiendo en una práctica cada vez más extendida.

Las casas y las habitaciones se decoran con motivos navideños. Las poinsettias de color rojo o blanco-crema se usan muy a menudo para los adornos de Navidad polacos; es habitual que se realicen arreglos con ramas de pino y paja en cestas de broza.
La Nochebuena es el día más importante de la Navidad en Polonia. Tras ayunar durante todo el día, las familias al completo se reúnen alrededor de una mesa muy elegante (el mantel blanco es absolutamente indispensable) y empiezan por compartir la oblea de Navidad, como un gesto de amor y reconciliación para desearse lo mejor desde lo más profundo de sus corazones. Tan pronto aparece la primera estrella de la noche se comienza con el festín navideño. Siempre hay un plato adicional puesto en la mesa reservado para un invitado inesperado… Los regalos se depositan debajo del árbol de Navidad decorado; por lo general, los miembros más jóvenes de la familia son los encargados de repartirlos. A diferencia de la tradición anglosajona, los regalos son anónimos.


Suecia: Santa Lucía

En Suecia, sus habitantes se desean feliz Navidad (“God Jul”) durante 20 días, desde el día 25 de diciembre y hasta el 13 de enero, de conformidad con un decreto aprobado por el rey Canuto en el siglo XI.

La Nochebuena es tradicionalmente un día familiar. Las celebraciones empiezan al anochecer, es decir, a primera hora de la tarde. Al igual que en muchos otros países europeos, lo más destacado de estos días es la comida en familia, los regalos, así como las visitas de y a los familiares.

En la festividad de Santa Lucía, el 13 de diciembre, se recuerda a la Santa y Mártir Lucía, originaria de Sicilia, y que al parecer salvó a los suecos de una hambruna terrible en el siglo IV. El 13 de diciembre, los niños suecos traen comida hasta la cama de sus padres en memoria de la salvadora santa. A primera hora de la mañana, la hija mayor de la casa aparece disfrazada de Lucía, reina de la luz, enfundada en un vestido blanco y con una corona de velas adornando su cabello. Lucía es sinónimo de platos tradicionales, sobre todo dulces, que se preparan con esmero y se adornan con poinsettias de un rojo intenso. En todo el país, los suecos recuerdan a Santa Lucía con numerosas procesiones, celebraciones y desfiles.

Suiza: «Samichlaus» y mesa para los regalos

En Suiza, las cuatro semanas de Adviento se celebran con costumbres tradicionales, como la corona y el calendario de Adviento. San Nicolás o “Samichlaus”, como se le conoce en la parte alemana de Suiza, reparte dulces y regalos a los niños el día 6 de diciembre.

Para la mayoría de los suizos, la Nochebuena es una celebración familiar. El árbol de Navidad decorado, comer en familia, cantar villancicos, los regalos y la misa de Navidad son parte esencial de estas fiestas.

En la actualidad, las habitaciones y las ventanas se siguen decorando; la poinsettia se ha convertido en uno de los símbolos contemporáneos de la Navidad. Las poinsettias son adecuadas para cualquier diseño interior, como por ejemplo en un arreglo con algunas ramas de poinsettias de colores diversos, que en su momento se sellaron con la llama de una vela para incrementar su longevidad y se replacearon en un manto floral. Si además se opta por una maceta grande de color apropiado y con una perla ligeramente drapeada, el aspecto de la mesa destinada a los regalos será inmejorable.

Y terminamos el repaso por las tradiciones navideñas con las nuestras…

España: los regalos de los Reyes Magos

En España, el período navideño empieza con la lotería de Navidad del 22 de diciembre. Para los españoles, la Navidad es la fiesta más importante, seguida de la Nochevieja y el Día de Reyes, el 6 de enero.

Tradicionalmente, la Nochebuena se suele pasar en familia. Las habitaciones se decoran con ramas de pino, clásicas poinsettias de color rojo y blanco-crema, velas encendidas y las figuras del belén; todo ello crea un ambiente propicio para estas fiestas, que contrasta con la vida cotidiana del resto del año.

Después de la cena, durante la cual se suelen servir especialidades culinarias locales, se celebra la Misa del Gallo en la noche del 24 de diciembre. Este oficio religioso sirve para recordar que fue un gallo el primero en anunciar el nacimiento del niño Jesús.

El 6 de enero, día de la Epifanía, es una de las jornadas más importantes, que sirve para poner punto y final a las fiestas navideñas. Según la costumbre española, los Tres Reyes Magos traen regalos a los niños. El 5 de enero, en el marco de la Cabalgata, aparecen los Tres Reyes Magos y otras figuras históricas, que tiran caramelos a los niños. Tradicionalmente, los Reyes Magos llegan montados en una carroza.

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Publicado el

diciembre 3, 2022

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